Desde que la semana pasada, el todavía Secretario General
del PSOE anunciara su renuncia a su cargo
y al acta de concejal y que en Madrid consideran como una grave irresponsabilidad
de una persona irreflexiva y desde las “familias”, una alta traición a los
pactos realizados para el reparto del poder entre los dueños del partido, al
querer imponer sus deseos de incluir a su círculo “íntimo y personal” en el
grupo municipal.
Hasta este momento han sido dos, las personas que han dado
un paso al frente para optar a la dirección del partido, por un lado el
Secretario de Empleo, D. Manuel Hernández Peinado y por el otro D. Pablo Núñez
Díaz, Secretario de Política Social. Ambos en la ejecutiva que lideraba el Sr.
Carracao.
Desde una situación normal, lo lógico hubiera sido presentar una única
candidatura, sobre todo cuando los dos provienen de un mismo órgano, dado que deben
tener, en primer lugar, una comunicación fluida motivada por las constantes
reuniones de trabajo, sobre todo en el momento en que se supone deben “ordenar”
la sucesión; en segundo lugar, ambos
deben compartir un mismo proyecto, pues con igual programa se presentaron a las
elecciones en la que uno accederá al Ayuntamiento y el otro, no; y en tercer lugar y prioritariamente,
porque si desean ser una verdadera alternativa de gobierno, deben mostrar un mínimo de coherencia y responsabilidad que el Sr. Carracao no ha
demostrado.
Pero esa sería una circunstancia cabal desde un raciocinio
natural, sin embargo hemos de tener en
cuenta que nos enfrentamos a la lógica de un partido político y no de uno
cualquiera, sino del PSOE de Ceuta, por lo que utilizar un criterio lógico
deductivo no es posible hay que ir a la emoción pura y dura, al interés único y
personal, a la lucha cainita con la que tanto disfrutan. Si ya de por sí el
PSOE ha sido, es y será una organización endogámica, en la que los intereses de
las familias han prevalecido sobre cualquier otro para poder mantener esa
mínima cuota de poder en la que cada vez que ganan, no los suyos, sino los
socialistas en España, repartirse las migajas de la administración central; donde
cualquier persona ajena al círculo familiar es vista como un peligro a sus
prebendas y mucho más si es una persona preparada, trabajadora y que aporta nuevas ideas y proyectos; ahora,
prietas las filas, se optará por cerrar más aún el partido, para evitar que
cualquier trepa quiera apoderarse de las históricas siglas que tanto han
dado a sus intereses. Así que preparémonos, los que disfrutamos con la “política”,
para deleitarnos con un mes de enfrentamientos soterrados, de peleas barriobajeras,
de navajazos traperos, vamos a ver al PSOE local en su faceta más peculiar, más característica, la
de destrozar lo poco que le queda.
Así sin el mínimo
respeto a las normas establecidas, la candidatura del Sr. Núñez rápidamente se
ha puesto en contacto con su militancia para apropiarse del trabajo de la
ejecutiva, donde también está el Sr. Hernández, así en su misiva a la
militancia le decía sentirse responsable y “defender el trabajo de la Ejecutiva y la militancia de estos últimos
años. Yo sí me considero orgulloso de quienes hemos hecho posible unos
resultados electorales importantes, que aunque insuficientes, son los mejores desde
hace 28 años”. No parece un juego muy limpio el apropiarse del resultado del
trabajo de un equipo.
También se ha autoproclamado candidato de las familias, al definirse
como un socialista con auténtico pedigrí caballa ”primero en mi adolescencia, a través de
mi padre cuyo trabajo nadie cuestiona a pesar del tiempo y que demostró tener
valor para renunciar por la ideología y frente a las estrategias”. Y eso de que
el trabajo de su padre nadie cuestiona, con pocas personas ha debido
dialogar, pues hasta él mismo se siente
responsable de muchos de los errores que condujeron al GIL al sillón municipal
y no es el primer ex secretario general del PSOE que acabó en el partido de Aróstegui
y siempre ha sentenciado que volvería al partido cuando residiera de Algeciras hacia arriba. No sé si será bueno ponerlo como referente,
pero eso deberán decidirlo los 170 militantes.
Y por último se apodera hasta del programa que entre todos los
militantes, simpatizantes y ciudadanos que quisieron construyeron: “Y más
recientemente como coordinador de la conferencia política que ha rearmado a
nuestro partido con un programa político exhaustivo, hecho con las ideas y propuestas
de las y los socialistas de Ceuta y la ciudadanía”. Como si el Sr. Hernández no
hubiera participado en el origen de gran parte de las propuestas.
La actitud que demuestra el Sr. Núñez poco tiene que ver con la
democracia participativa y el diálogo que quiere trasladar, más bien parece
como la norma que han tomado los dirigentes de Podemos, que hay que jugar con
sus reglas, actuar como lo hacen y tomar la calle, si no lo haces, eres casta, gentuza y antidemocrático. Si observan cuál ha
sido la campaña del partido en la ciudad, se parecía bastante a la que Podemos
hubiera hecho: asambleas callejeras, dar la victoria por hecha, la utilización
de las redes sociales, etc. En cierto modo a través de ciertas personas se intentaba dar
la imagen de que los “podemitas” en Ceuta estaban, no con ellos, sino que eran
ellos. Las urnas le demostraron que para
gobernar hay que ser serios.
A pesar de la derrota y de lograr la pírrica victoria de la
vicepresidencia, los “podemitas” siguen convencidos de que son el futuro del
PSOE, el futuro de la ciudad; Caballas se frota las manos, nada más abandonar el
Sr. Carracao el Ayuntamiento, decían que era fácil llegar a acuerdos con el
PSOE, acuerdos que a pesar de que la lógica democrática le daban al PSOE, tuvo que negociar para no perder la
Vicepresidencia y, con ese espíritu negociador de quien se siente generoso,
entregar a Caballas la selección del personal administrativo. Ya vendrán luego
las quejas, porque si gana este sector la purga será más que importante ¿o se
creen uds. que van a aplicar el socialismo compartido? Lo primero que exigirán
serán los asientos en el Ayuntamiento.
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