domingo, 15 de julio de 2018

La ineficiente y voraz Hacienda Local




El pasado mes de junio, el Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) del Consejo General de Economistas presentaba el estudio Panorama de la Fiscalidad Local 2018, donde, como en cualquier otra cuestión que se analice, nuestra hacienda local queda representada tal como es: ineficiente y voraz, tal como ha querido que sea nuestro inefable Alcalde. No solo por ser uno de los lugares donde los tipos impositivos son más altos, sino por la ineficaz gestión que se lleva a cabo, dejando de cobrar gran parte de los derechos reconocidos.








El estudio del REAF parte de los presupuestos de las entidades locales del año 2018, analizando la eficacia sobre los datos cerrados del año 2015. Entre los impuestos directos, el informe analiza el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) y el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM); en los indirectos se estudian el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) y el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IVTNU).



























En los impuestos directos, Ceuta se coloca en los tramos de cabeza en todos ellos en cuanto a presión fiscal, llamando la atención el de vehículos donde se ocupa el primer lugar, con una cuota para un turismo entre 12 y 16 caballos de 143,9€ mientras que en Melilla, el mismo vehículo abona 71,9€, la mitad. Lo que analiza el REAF son las cuotas, no las bonificaciones y según ese estudio, la cuota es el doble en Ceuta que en Melilla. 




Lo mismo sucede con el coeficiente de situación del IAE, donde en Melilla es la mitad (1,8) que en Ceuta (3,6). En el IBI es prácticamente el mismo en ambas ciudades, situándose en el tramo superior de la tabla impositiva.



 























En cuanto a los indirectos, Melilla no ha establecido el ICIO (al ser un impuesto potestativo) y en el IVTNU la diferencia es de 2 puntos porcentuales superior en Melilla, 29 frente a 27 de Ceuta.



Con relación a la eficacia impositiva, que el estudio mide como la relación entre la recaudación y los derechos liquidados, Ceuta en los impuestos directos se sitúa en penúltima posición con un 77,30% de recaudación sobre los derechos liquidados, superada por Melilla y delante de Andalucía. En los impuestos indirectos, Ceuta ocupa la última posición, con un 69,60% de eficacia, frente a Melilla que está en primera posición con un 99,80% de cobro de los derechos liquidados, casi la perfección.






La primera conclusión que hemos de sacar de estos datos es la nefasta gestión que nuestro ínclito Alcalde ha desarrollado a lo largo de las casi dos décadas que lleva apoltronado en el sillón consistorial, menos mal que era el entendido en impuestos, habiéndo sido Director General de Tributos. Ante la imposibilidad de poder cobrar todos los impuestos reforzando los servicios de control y lucha contra el fraude, lo que ha preferido hacer nuestro inepto Primer Edil es subir los impuestos a los que los pagamos.





Con la excusa de las supuestas ventajas fiscales que nuestro Régimen Económico y Fiscal ofrece a los ceutíes, el Desgobierno del Sr. Vivas la ha utilizado para elevar los tipos impositivos a los más altos de España y así poder obtener los fondos para mantener a esa Corte de los Milagros que nada aporta a los intereses de Ceuta. Los datos comparativos con Melilla así lo demuestran.





La compensación del IPSI importación, del tabaco, y ya hasta de los Hidrocarburos (esta compensación de Hidrocarburos no existe en Melilla, donde sus tasas sobre las gasolinas son mucho más bajas que  en nuestra ciudad), impuestos que suponen más de un 40% de los ingresos del Ayuntamiento, ha llevado a un abandono del control de los tributos, unos porque tan solo son un “complemento” del presupuesto (no alcanza al 4%) cuando en el resto de España suponen casi un 40% (el IBI, el IAE y el IVTM); y otros porque al estar compensados le ha dado a nuestro incompetente Alcalde exactamente igual la cantidad que se recaudara.






Y así se ha demostrado cuando se han puesto algunos medios contra el fraude fiscal, decía la ilegal encargada de  la Hacienda Local que en el mes de marzo de este año se ha “podido multiplicar por tres las bases imponibles de las mercancías infravaloradas desde que dio comienzo el año 2018”. Aunque las demás mercancías se han debido multiplicar por cero, dada la caída en picado que tiene este impuesto provocada por la desidia del Desgobierno del Sr. Vivas, que falto de ideas y proyectos, se encierra en su despacho evitando enfrentarse a los problemas y no aportando solución alguna a la grave crisis económica donde nos ha conducido su  abulia.






En los presupuestos de este año está previsto unos ingresos por ICIO de 400.000€, si se mejorara la gestión del IBI a medias nacionales, la recaudación se elevaría en casi 600.000€ lo que permitiría derogar el impuesto sobre las construcciones potenciando el sector que  el inepto Alcalde está hundiendo por su entrega de casi todas las obras a la multinacional TRAGSA, que nos cobra a precio peninsular sin tener en cuenta nuestras ventajas fiscales y laborales (recordemos que en Canarias TRAGSA tiene precios especiales), y que apenas afecta al empleo en nuestra ciudad.



Con una mejor gestión de las distintas herramientas impositivas sería factible reducir la voraz presión fiscal a la que nos tiene sojuzgado nuestro incapaz Primer Edil, sin embargo su falta de proyecto hace que cada vez paguemos más y más impuestos ante su cada vez mayor Corte de los Milagros que debe mantener con canonjías y prebendas. Pero ya saben en  ustedes está la solución, no se dejen embaucar por este charlatán de feria que sólo mira por su interés y el de sus redes clientelares  y nunca por el de los ceutíes.

domingo, 1 de julio de 2018

Y dos banderas negras


El pasado día veintinueve de junio la Asociación Ecologistas en Acción hacía público su informe anual que analiza la situación ambiental de las costas y del entorno litoral español. Como cada año le han correspondido al Desgobierno del Sr. Vivas dos banderas negras, no porque no sea merecedor de muchas más, sino porque esta organización ha decidido desde 2016 asignar dos banderas por provincia una por un caso de contaminación y otra por mala gestión.




Como en todas las áreas, el Desgobierno del Sr. Vivas carece de una política a aplicar, ni tiene política económica, ni social, ni de fomento,… cómo va a tener en eso de medioambiente, lo único que ha realizado son obras en unas infraestructuras que desconoce cuáles son las necesidades que deben cubrir, anteponiendo intereses empresariales y políticos por delante del interés general, pero esa es una de las características de esta Corte de los Milagros. Ya saben las "empresas amigas".

En esta ocasión la Organización ecologista ha otorgado la Bandera Negra al litoral de Calamocarro-Benzu por la contaminación debida a la acumulación de algas invasoras dentro de un Lugar de Interés Comunitario, y la Bandera Negra a la mala gestión del coralígeno de la costa de San Amaro porque provoca daños notables en una comunidad biológica importante, dentro del espacio marino protegido.



También han sido otorgadas a nuestra ciudad dos Banderas Azules, como cada año a las playas de la Ribera y del Chorrillo, únicas playas que existen para el Desgobierno del Sr. Vivas, manteniendo en el más absoluto abandono el resto, aunque para evitar las críticas a unas las denomina zonas de baño y a otras playas. Según el Ministerio existen en nuestra ciudad dieciséis playas, para el Ayuntamiento solo seis, esa debe ser la causa por la que no reciben ningún cuidado. En el último informe sobre Banderas Negras de Ecologistas en Acción donde se incluía el estado de las playas en el año 2011, las banderas que se asignaban a Ceuta eran cinco, más del doble que las banderas azules. Sin embargo la situación en que se encuentran esas playas no ha variado desde esa fecha, mientras que se han seguido “gestionando” la obtención de unas banderas azules que son más publicidad, que realidad.

Estos supuestos “galardones” no se conceden al libre albedrio, ni tampoco por el exigente cumplimiento de unas supuestas calidades medioambientales que nadie conoce, por eso el Desgobierno del Sr. Vivas oculta el procedimiento por el que las recibe, pero que muy posiblemente ocurra como en el resto de entidades que ya lo han denunciado, para mantener o ampliar las banderas azules deben realizarse unas “auditorías medioambientales”, que son realizadas por la empresa Banderas de España S.A., previo abono de la misma, la Fundación para la Educación Ambiental renueva la adjudicación de la misma. Por eso muchas de estas administraciones que se han negado a pasar por caja han visto reducidas sus “banderas” en sus playas.  Es más un negocio privado de una empresa, de la que se desmarcó la Unión Europea en 1999 porque “los criterios que se siguen para otorgar las banderas carecen del suficiente rigor”,  que una verdadera medida de calidad medioambiental.

Un negocio privado que sólo sirve para que todo el litoral español se haga fotografías con los políticos de turno izando banderas que de nada sirven para valorar la situación real de nuestras playas y que lo único que persiguen es buscar una imagen que vender a sus electores, no defender unas playas de calidad al servicio de los vecinos.


Igual sucede con ese engendro de la “escoba de oro”, de la que el Desgobierno del Sr. Vivas recibió la de plata y la de oro. Otro negocio en el que las grandes empresas del sector, junto con las administraciones locales, se dedican a comprarse premios para intentar tapar la nefasta gestión que realizan, debiendo pasar por un proceso que lleva desde la escoba de plata hasta la de platino, incrementando paulatinamente las aportaciones a realizar. Con ello quieren convencer a los ciudadanos que la limpieza viaria es de las mejores de España y por eso es premiada, mientras que la realidad de sus calles es muy distinta. Una estafa como aquel premio a la excelencia educativa que compró una institución local con presupuesto municipal.

Mientras el Desgobierno del Sr. Vivas se dedica a la adquisición de galardones que oculten su inexistente política medioambiental, nuestro entorno natural sufre el mayor de los abandonos, sin Plan de Gestión de Residuos, por el que posiblemente seamos mutados por la Unión Europea; con unas pérdidas de agua que se elevan a casi la mitad que sí tenemos que pagar a la empresa de desalanización; la Ordenanza de Limpieza se olvidó en un cajón y Ceuta carece de unas normas sobre las bolsas de plástico que deberían haber entrado en vigor el pasado uno de enero; las partidas en la repoblación forestal que figuraban en los presupuestos de los dos últimos años no se han utilizado, a pesar de haber sufrido uno de los más graves incendios forestales en el 2015.

La realidad nos indica que el Desgobierno del Sr. Vivas no tiene política medioambiental, al no tener un proyecto de futuro para la ciudad, lo abandona todo a la improvisación y a los golpes de efectos de unos galardones que pretenden ocultar la nefasta gestión de nuestro ínclito Alcalde. Bien debería explicar el Sr. Vivas qué le cuesta a los ceutíes esas banderas azules o esas escobas, que solo sirven para su publicidad, no para tener mejores playas o calles más limpias.

Pero ya saben en  ustedes está la solución, no se dejen embaucar por este charlatán de feria que sólo mira por su interés y el de sus redes clientelares  y nunca por el de los ceutíes.