La pasada semana volvieron a saltar a la primera página de la información local los fondos que la Unión Europea a través de sus diferentes organismos nos traspasan para hacer de nuestra tierra un lugar con un futuro y permitir crear un modelo económico acorde con unos principios de desarrollo sostenible. En esta ocasión la denuncia presentada por los socialistas ceutíes desde Bruselas sobre el uso indebido de los fondos ha levantado la airada respuesta de nuestro técnico en Procesa al servicio del gobierno municipal.
Al parecer los cuantiosos fondos llamados estructurales no son utilizados lo correctamente que su fin persigue y que no es otro que el de transformar nuestra obsoleta estructura productiva a través de la creación de las infraestructuras que faciliten la creación de empresas, la superación del déficit de equipamientos que asola nuestra ciudad, la mejora de la capacitación del capital humano y potenciar la política de igualdad de oportunidades. Es decir generar los atractivos suficientes para que cualquier empresario quiera invertir en nuestra ciudad arriesgando su capital y podamos crear la suficiente riqueza para que podamos seguir viviendo en este pueblo.
Cuando se analiza cual es la situación actual de nuestra economía uno se hace esa pregunta ¿dónde está la transformación de nuestra sociedad con los fondos estructurales? ¿Dónde están los cerca de 20.000 millones de nuestras extintas pesetas que han sido invertidos por la Unión Europea en el desarrollo de nuestra ciudad? Porque supongo que el desdoblamiento del Paseo de Las Palmeras no nos habrá costado eso; y más cuando supone una mejora en nuestra calidad de vida mas que un aliciente empresarial para invertir en nuestra ciudad; es decir un poco más de maquillaje al plan pponds de belleza en siete días. En cuanto a la superación del déficit de equipamientos bien poco se ha avanzado, seguimos con un hospital tercermundista (lógico para una ciudad tercermundista, como la define nuestra concejala de turismo), en el abastecimiento del agua, algo hemos avanzado, pero hemos privatizado un bien público que tarde o temprano nos costará la subida del agua y seguimos sin disponer agua las 24 horas al día todos los ceutíes (y no la tendremos antes de mayo, ya verán); en cuanto al suministro de energía como ya me he comprado un Sistema de Alimentación Ininterrumpida (SAI) en un comercio local, nuestra empresa de alumbrado potencia el comercio local, para que luego se quejen los del ayuntamiento. Y no digamos en la mejora de la capacitación del personal, somos la ciudad con mayor fracaso escolar, y en cuanto a la formación profesional seguimos esperando la creación de aquella Fundación de la Construcción que nos prometió el concejal de economía y desempleo, o de cualquier otra actividad que dé a nuestros parados la posibilidad de obtener una formación que les permita salir de ese círculo vicioso que son los Planes de Empleo, pan para hoy y hambre para mañana (si nadie lo remedia, estos Planes de Empleo se acabarán en el 2.006). En cuanto a la política de igualdad de oportunidades no se puede criticar lo que no existe.
Procesa es la encargada de gestionar estos fondos, es la que los recibe y luego se encarga de distribuirlos entre los distintos proyectos; de ahí que uno se pregunte para qué sirve esta empresa, que tiene tan rimbombante nombre de Sociedad de Fomento si cuando hay que crear las bases para que se asienten las empresas debemos llamar a la Sociedad Estatal de Participaciones Empresariales ante la incapacidad de su técnico para crear un simple polígono industrial; si para crear el vivero de empresas debe ser la Cámara de Comercio en unión de una fundación privada quien lo ponga en marcha ante la inoperancia de su técnico para hacerlo; ¿cuántas empresas se han creado con el apoyo de esta Sociedad de Fomento, si exceptuamos las famosas cooperativas que realizan los servicios al ayuntamiento? ¿Cuántos empleos inducidos se han generado a través de esta empresa municipal? Porque lo único que uno constata es el incremento del paro y del cierre de empresas. Eso sí, se han realizado multitud de estudios, análisis, proyectos o cualquier otro tipo de servicio en el campo que sea que se han pagado religiosamente, pero todos estos estudios deben contabilizarse como un gasto y no realizar contabilidades creativas y decir que son inversiones, las inversiones son tangibles y deben transformar nuestra sociedad y nuestra ciudad no se ha transformado, se ha maquillado para poder llegar a las próximas elecciones con los deberes hechos.
Nuestro técnico ha transformado una empresa creadora de riqueza para nuestra ciudad que debe ser Procesa en una oficina burocrática de gestión de subvenciones, pero ante tanta responsabilidad asumida debe corresponderse con un sueldo acorde a la misma por ello en el tiempo que nuestro técnico lleva en la empresa se ha casi doblado el sueldo. Eso si que es invertir en el futuro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario