domingo, 5 de septiembre de 2004

El Acto

Con unos diez minutos de retraso se iniciaba el solemne acto de celebración del Día de la Autonomía de nuestra Ciudad. Allí había acudido la flor y nata de nuestra sociedad encabezada por nuestro actual Alcalde y su insigne invitado el Duque de Braganza y Jefe de la Casa Real de Portugal D. Duarte de Braganza. Pero por lo visto no todos fueron, pues si las sillas reservadas para el público estaban llenas, un tercio de la de invitados quedó vacía. Fue curioso ver a los miembros de la Cofradía de Pescadores entre los Hermanos Mayores de Cofradías y Hermandades, debe ser cuestión del protocolo eso de unir cuestiones religiosas con económicas.

El presentador de la gala nos hizo una breve biografía del invitado de nuestro Alcalde, añadiendo que está emparentado con la familia real española, por lo que puede decirse que ésta está representada en este día. Curiosa forma de hacer presente a quien no lo desea. Si nuestro Rey ha declinado toda invitación que se le ha ofrecido para estar en nuestra tierra, no necesitamos que nuestro Alcalde se invente intermediarios para excusar su presencia. Ni está, ni se le espera.
 
Pero más grave aún es la ausencia de las Instituciones de nuestro Estado, al parecer nuestro Alcalde ya ha reconocido que no se ha invitado a nadie, nuestro Alcalde ha apostado por un regreso nostálgico al pasado, a nuestra etapa de unión con Portugal, no sabemos si en un deseo actual de retorno a esa Historia o en un intento de olvido de la pérdida del poder central. Puesto que en la misma boda a la que asistió nuestro primer Edil y donde ofreció al pretendiente al trono de Portugal y Brasil su visita a nuestra ciudad, se encontraban todas y cada una de las personas que ostentan los más altos cargos de nuestras Instituciones. ¿No era ese el momento para haber mostrado el interés de nuestra Ciudad, como Institución del Estado, en que alguna de esas personalidades nos acompañara en este Día? ¿O sólo era el momento de invitar al aristócrata familiar del Rey? ¿O antepuso nuestro Alcalde los intereses de su partido a los de nuestra Ciudad como es habitual en sus actuaciones?
 
Nuestro Alcalde debería explicarnos cuáles han sido las razones para que en este día, que nuestros políticos quieren imponerlo en nuestras tradiciones como uno de los días grandes de nuestra Ciudad, no haya asistido ningún miembro de las Instituciones de nuestro Estado, sustrayéndole a los ceutíes la posibilidad de sentirse integrados en España. Excusas como la del año electoral no hay quien se las crea, pues si en mayo podía invitar al aristócrata, también podía haber realizado el esfuerzo para que nos visitara algún representante oficial de nuestra España, pero ni una sola carta, llamada o recado ha salido de nuestro Ayuntamiento hacia nuestras Instituciones Estatales.
 
El reconocimiento de que no se ha invitado a nadie es un grave fallo de protocolo y la cuestión no se puede saldar con un simple “tirón de orejas”, como le gusta hacer a nuestro Alcalde, su numerosa corte de asesores debe asumir las responsabilidades políticas correspondientes y presentarle la dimisión, o ser cesados de inmediato por si ineptitud para atender las cuestiones inherentes a su cargo, si no sirven ni para llevar una agenda ¿qué favores les está pagando nuestra primera autoridad a toda esa caterva que le rodea con cargo al presupuesto municipal?
 
El Sr. Vivas ha hecho un uso partidista de la Ciudad, anteponiendo los intereses de su partido a los de los ciudadanos, incluso aprovechó el discurso oficial para explicarnos las supuestas bondades de su política económica y social (haciendo hincapié en el comercio, ¿ahora hay que exigir la frontera comercial?) e incluir la problemática inmigratoria ( como si este año fuera el primero que tuviéramos este problema) y, sobre todo, imponer unas líneas de diálogo a los partidos de la oposición en el desarrollo del nuevo estatuto, después de decir (¿cínicamente?) que nadie está legitimado para imponer sus pretensiones a los demás y nadie debe aceptar tales imposiciones, al señalar que no significa, ni debe significar una duplicidad de funciones, la asunción de competencias no deseadas y más gastos. ¿O sólo se refería con eso de la imposición a quienes ya han empezado a mostrar las primeras ideas sobre el nuevo Estatuto?
 
Bien haría nuestro Alcalde en dejar las confrontaciones con el partido socialista si desea que nuestro pueblo avance, su política de enfrentamiento sólo puede perjudicar a Ceuta y debe empezar a pensar en construir nuestro futuro contando que, por ahora, en Madrid manda el Partido Socialista Obrero Español.
 

No hay comentarios: