“Como una madre”

“Esta ciudad ha sido una buena madre para sus hijos y los que han decidido volver han sido bien acogidos, tenemos una política social importantísima”, así se refería el Vocero del Desgobierno del Sr. Vivas a la escasa reducción del desempleo en Ceuta, mientras que se congratulaba de haber superado los 22.000 cotizantes en la Seguridad Social.

Y añadía que en cuanto al desempleo “hay que tener en cuenta el crecimiento de la población por encima muy mucho del incremento natural de la población”. Como siempre sin aportar ni un solo dato esta Corte de los Milagros enumera una serie de informaciones sin justificación alguna como si fueran verdades relativas para llegar a la verdad absoluta: Ceuta sobrevive gracias a nuestro inepto Alcalde.

Vayamos por partes, como diría “Jack el Destripador”. El crecimiento natural o vegetativo de una población es la diferencia entre nacimientos y defunciones en un período determinado. En nuestro caso este dato es uno de los mayores de España debido a la alta tasa de natalidad, a pesar de que los medios de nuestra sanidad impiden que la tasa de mortalidad se acerque a la media nacional. 

En lo que llevamos de siglo XXI la población censada en nuestra ciudad ha pasado de 75.694 personas en el 2001 a 84.519 en el 2016, un incremento de 8.825 ceutíes residentes. Sin embargo, el crecimiento vegetativo ha sido de        9.460 personas (17.538 nacimientos, frente a 8.078 defunciones, según datos del Instituto Nacional de Estadística). Por lo que se ha producido una salida de 635 personas, que han debido abandonar nuestra ciudad por un cúmulo de circunstancias. Es decir que según los datos estadísticos del organismo oficial no ha existido ningún retorno masivo de ceutíes que se encuentran por esa diáspora a la que en muchas ocasiones les ha condenado el Desgobierno del Sr. Vivas, mas bien al contrario, han sido más los paisanos que han abandonado nuestra ciudad. Pero para esta panda de Saltimbanquis, la realidad no les va a estropear un buen titular, sobre todo si es para disculpar a nuestro inefable Alcalde.

El Desgobierno del Sr. Vivas se “congratula” de generar 5.653 nuevos afiliados en los 17 años que lleva repantingado en la poltrona del Ayuntamiento, como si ello supusiera un logro, quizás habría que analizar qué hubiera pasado si este incompetente Alcalde no hubiera estado al frente de un ejecutivo que se ha caracterizado por su inacción, el elevado endeudamiento que ha provocado en las arcas municipales sin que se tradujera en inversiones productivas, el mantenimiento de una red clientelar que le mantiene en el poder y una fractura social que mantiene en el umbral de la pobreza a más del 40% de la población.

Si comparamos los resultados con Melilla, nos encontramos con que el incremento en los afiliados, en el mismo periodo, es de 7.926 personas, un 40% más que en nuestra ciudad, por lo que debemos concluir que las políticas económicas del vetusto profesor mercantil que gobierna Melilla permiten la generación de más empleo que las de nuestro moderno economista que es incapaz de mantener una decisión más allá de un trimestre.

Analizar la política que ha llevado a cabo nuestro apócrifo Alcalde  en cuanto a comercio, industria, turismo, sociedad de la información, puerto, o cualquier otra actividad económica es abrir un libro en blanco, nada se puede encontrar que haya provocado un cambio en nuestra estructura económica, alguna medida que apoyara a nuestro sector empresarial para que generara más empleo, incluso la administración local ha sufrido un descenso del 25% de sus efectivos. 

Lo único que existe es la pérdida uno detrás de otro de trenes que podrían habernos llevado a otra situación económica, sin embargo lo que se ha potenciado es vivir de la subvención del Presupuesto ya sea del Estado, ya de la Unión Europea, una dependencia que hace imposible trazar cambios en nuestro régimen económico y fiscal que provoquen un desarrollo en nuestra economía, es tal la dependencia que para modificar un impuesto hay que pedir la venia al peor Ministro de Hacienda de la democracia, eso es lo que entiende por autonomía financiera este individuo.

Y aún así se alegraban de tener una mayor deuda que Melilla porque “Ceuta había dado un salto cualitativo superior”. Lo único que le preocupa a nuestro inefable Primer Edil es seguir cobrando como funcionario, por eso ya se ha apresurado a solicitar la prolongación en el servicio activo antes de que la jubilación le obligue a rebajarse un sueldo inmerecido.

No podemos pasar por el alto el “comportamiento maternal” al que se refería el emisario del Desgobierno del Sr. Vivas con respecto a esos supuestos retornados (que ya hemos demostrado que no existen), primero confundir Ceuta con su nefasta gestión municipal es vilipendiar nuestra ciudad y segundo comparar el concepto de madre con su “Acción Social” es ultrajarlo; ni nuestro ínclito Alcalde es Ceuta, ni su aciaga política social puede entenderse como maternal; esa comparación es como entiende esta Corte de los Milagros los servicios sociales: como una beneficencia que es concedida por su gracia a quienes ellos deciden.

Los Servicios Sociales son un derecho, una serie de prestaciones técnicas ofertadas colectivamente por la Administración a aquellos que cumplen una serie de requisitos, no es un bien graciable, a ver si aprenden de una vez la diferencia. Sobre todo cuando sus “ayudas sociales” se ven consumidas a mitad de cada año porque no presupuestan las necesidades reales de nuestra ciudad, si no lo que graciosamente consideran que van a repartir, convirtiendo un derecho en un óbolo.

Nuestra ciudad no merece un Desgobierno que sólo mira por sus intereses, por continuar en la poltrona sin solventar los graves problemas que ellos han generado al no tener un proyecto de ciudad, existen muchas posibilidades para cambiar esta trayectoria que nos lleva a la ruina, pero para ello hace falta creer en Ceuta, y a esta patulea le falta mucha fe.