domingo, 3 de diciembre de 2017

No hay voluntad política



El pasado jueves el Instituto de Estudios Ceutíes programaba una jornada sobre la construcción, centrada en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) como elemento clave de la actividad económica de la Ciudad. Y la principal conclusión que se obtuvo fue la pronunciada por uno de los ponentes: “No hay voluntad política ni capacidad técnica para aprobar el PGOU”.



El PGOU es un elemento clave para el desarrollo de nuestra ciudad, sin él pocas avances pueden llevarse a cabo, y para aprobarlo, se  debe partir de una sencilla premisa: realizar un proyecto que nos permita convivir a todos en nuestra ciudad, en el que ocio y negocio puedan compatibilizarse desde cualquier lugar del territorio que se planifica. Idea a la que nadie pondrá pega alguna, aunque ya sabemos que si es una idea tendrá sus detractores y, a algunos, pensar no se nos está permitido, pero que se le va a hacer, es libre y gratuito.


Desde el año 2000 se lleva intentando modificar el actual PGOU, durante los últimos diecisiete años, una única persona ha estado sentada en la poltrona de la plaza de África, disfrutando de unas mayorías absolutas, tanto en nuestra ciudad como en las Cortes, que le hubieran permitido llevar a cabo los más arduos trabajos con la mayor de las facilidades; sobre todo cuando nuestro inepto Alcalde ha estado presumiendo de las buenas relaciones que ha mantenido con la cúpula del Partido Popular. A pesar de ello, nada ha conseguido para nuestra Ciudad, aparte de que no le corten el grifo para mantener su red clientelar, poniendo en peligro la financiación de nuestro Ayuntamiento, pues todas esa subvenciones que tan digitalmente reparte dependen de la arbitrariedad del Gobierno de turno.



Decía el Presidente de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Ceuta  que en “en una empresa privada el responsable ya estaría en la calle”, pero como se trata del dinero público, del que ponemos cada uno de nosotros, parece que las responsabilidades se evaporan y nadie asume la más mínima responsabilidad de este rotundo fracaso. Las excusas que salen de nuestro incompetente Alcalde le convertirían en el hazmerreir de cualquier sociedad, sin embargo este inepto ha sido valorado como uno de los mejores alcaldes de España, uno puede entenderlo del Sr. Azkuna en Bilbao, pero de este cantamañanas.


Sin embargo el PGOU no es el único fracaso que cosecha nuestro apócrifo Primer Edil, en deuda, desempleo y desigualdad social somos los campeones. Allá donde pongas el análisis, encuentras un problema sin resolver desde el siglo pasado,  la incapacidad que demuestra este incompetente ha llegado a tal nivel que los empresarios, supuestamente quienes más cerca están del Partido Popular, se plantean realizar un cierre patronal ante la falta de actuación del Desgobierno del Sr. Vivas.



Todas las promesas realizadas por nuestro apócrifo Alcalde han sido incumplidas una y otra vez, a pesar de disponer de uno de los mayores presupuestos municipales, contando como fuentes de financiación el ayuntamiento, el estado y la Unión Europea, de tener una capacidad fiscal que le posibilita maniobrar para luchar contra el ciclo económico, ha sido incapaz de crear una estructura económica que cimentase un crecimiento y disminuyese la brecha social existente. Tan sólo ha utilizado el aumento de los impuestos para seguir manteniendo a su Corte de los Milagros y ahora quiere bajárselos al combustible de  los yates, no tuvo bastante con hundir el sector de las gasolineras.


Ni comercio, ni industria, ni puerto, ni administración, ni infraestructuras, nada hay que pueda suponer un cambio socioeconómico que nos haga entrar en el Siglo XXI, este economista del XIX sigue anclado en la teorías soviéticas de la planificación, entendidas como que se planifica desde su despacho, para así autorizar aquellas que le han permitido seguir repantigado durante este aciago periodo. Ahora, deprisa y corriendo quiere aplicar una serie de “medidas” para abaratar el barco y pagar la “frontera inteligente”, ¿ya tiene las competencias de frontera?


Este individuo ni tiene voluntad política ni capacidad para plantearle un futuro a nuestra ciudad, su inexistente compromiso con el desarrollo de Ceuta se palpa en la falta de un proyecto en el que basar sus políticas, su inexistencia le hace ser un veleta al servicio de los intereses de su  Corte de los Milagros quienes han sido los únicos beneficiarios en este desdichado periodo que padecemos desde que asaltara el poder este incapaz.


Ceuta tiene soluciones y es posible cambiar el sistema socioeconómico que nos permita entrar de una vez por todas en el Siglo XXI, pero para ellos necesitamos personas que crean en esta ciudad, comprometidas y capacitadas para tomar decisiones, no vividores que tan sólo pretenden sustentar esa red clientelar que los mantiene a costa del futuro de los ceutíes.


En ustedes está la solución.

No hay comentarios: