La subvención ahoga nuestra economía

El pasado día once el Alcalde de Melilla D. Juan José Imbroda Ortiz anunciaba que su ejecutivo iba a proceder a reducir el IPSI al textil en un 50% y en los zapatos, en casi un 30%, dejando los tipos en un 5%. Conociendo la forma de actuar del líder de los populares melillenses se llevará a cabo en este mismo año, para que sus efectos sean inmediatos en su economía.

En  nuestra ciudad, nuestro inefable Alcalde no puede tomar esas medidas contundentes, que diferencian a un político de un pelele, así mientras el vetusto Perito Mercantil actúa en función de los intereses de su ciudad, nuestro moderno Economista se dedica a mantener su Corte de los Milagros a través de los presupuestos y esos millones de subvenciones que reparte con “digital” método entre su red clientelar.

La última propuesta que ha realizado nuestro ínclito Primer Edil es reducir los tipos del IPSI en un 10%, siempre y cuando sea aceptada por el peor Ministro de Hacienda de la democracia, el Sr. Montoro, su absoluta dependencia de  la compensación de los impuestos locales le obliga a someterse a esa dependencia. Aunque sus mentiras  electorales, perdón, promesas, hablaban de una reducción del tipo a casi cero para algunos productos “gancho”, ya saben los helicópteros debe ser entendido como ese tipo de producto que va a atraer a los turistas para realizar sus compras.

Sin embargo en la modificación de la ordenanza del IPSI que ha llevado nuestro apócrifo Alcalde al Pleno del Ayuntamiento, nada de estas reducciones de tipo se producen, más aún la supuesta adaptación a la nomenclatura de la Unión Europea va a  provocar que, debido a la desidia con la que el Desgobierno del Sr. Vivas actúa, el tipo de algunos productos  se incrementen hasta un 1.300%, como es el caso del café sin tostar (una fórmula que impide que alguna cafetera pueda instalarse en nuestra ciudad, a la última ya la echaron) o el caso de la pesca fresca que se incrementa un 500%, ese es el apoyo que da nuestro inepto Alcalde a un sector tradicional de nuestra economía al que nunca ha prestado atención.

El comercio local no ha sido nunca apoyado por el Desgobierno del Sr. Vivas, como escribía en 2002, “ahora parece que nuestro Ayuntamiento se ha dado cuenta del asunto y crea rápidamente un plan de actuaciones para maquillar su desinterés por nuestro comercio local a lo largo de casi dos años de mandato del actual equipo de gobierno, con esta serie de gestos de cara a la galería se pretende intentar paliar el desplome de negocios y llegar con un poco más de oxigeno a las próximas elecciones.”

Realmente nuestro incapaz Alcalde no ha hecho nada por ningún sector de la economía de nuestra ciudad, hasta la administración local la ha reducido en un 25%, el único objetivo ha sido el mantener unos ingresos a través de las transferencias del Estado que sostuvieran su poltrona, así ha ido desmantelando nuestro Régimen Fiscal en busca, no de una solución autónoma de nuestra economía, sino de una dependencia absoluta de unos fondos que no están asegurados por ley, que tiempo ha tenido con la mayoría absoluta de su partido para elevar a norma legal todas esas transferencias que ahora dependen de la bondad de un gobierno, no de nuestros derechos a ser igual de españoles que el resto.

Así ha llegado a hundir el sector de las gasolineras con tal de recibir la compensación del Impuesto, una modificación que nos hizo pagar los impuestos del Diesel un 200% más, provocando la crisis del sector y la huida de la demanda hacia Marruecos, pero logró como un pedigüeño que el Gobierno central le compensara este tributo desde el 2011, a unos niveles que nunca se habían recaudado anteriormente. Una compensación que el Ayuntamiento de Melilla no recibe, puesto que no ha visto necesario modificar un impuesto para gravar con un tipo un 400% superior al que pagamos en Ceuta.

Puesto que la economía ceutí no ha sido potenciada por el Desgobierno del Sr. Vivas, ante su falta de proyecto para la ciudad se dedica a prometer acciones que nunca lleva a cabo (si revisan las hemerotecas observarán que las mentiras de este incapaz Alcalde que padecemos son las mismas año tras año) y puesto que nada hace se dedica a pedir fondos al  Estado, así si en el año 2003 los ingresos del presupuesto que procedían de ingresos propios rondaba el 60% del total, para el año 2018 indican que ese porcentaje ha caído al 34.56%.  Si se añade que se prevé cerrar este año con una deuda con las entidades financieras (que no significa que sea todo lo que se debe) de más de 191 millones, mientras que en Melilla sólo es de 71 millones, empieza a entenderse las razones por las que el Vetusto Perito Mercantil puede realizar una política de reducción de tipos del IPSI y nuestro Moderno Economista se ve obligado a subirlos porque su sumisión a los ingresos del Estado se lo impide.

La queja de los comerciantes, que como el resto de la sociedad ceutí, se sienten abandonados por este inepto Alcalde y el Gobierno Central representado por un nefasto Delegado, se basan en la inacción con la que ha actuado durante los funestos diecisiete años que lleva sentado en la poltrona y que sólo han servido para ahogar a nuestra economía. Claro que hay soluciones, si se tiene un proyecto de Ciudad y se cree en el futuro de Ceuta, aplicar medidas correctivas de urgencia que permitan a nuestros sectores económicos salir de la crisis es factible, aplicar un tipo del 0.5% a determinados productos puede servir de aliciente, e incluso el resultado producir una mayor recaudación, debido a una mayor actividad. Como no se sale de la crisis es sentado en la poltrona del consistorio sin hacer absolutamente nada.

Pero ya saben en ustedes está la solución.