El pasado viernes, por primera vez en quince años, el
ejecutivo municipal del Sr. Vivas no aprobaba el proyecto de presupuestos que
la persona responsable del área de Hacienda presenta cada año al consejo para que
sean ratificados por el resto de concejales, mientras sonaban las
fanfarrias y se alzaban las loas de su
Corte de los Milagros sobre la magnanimidad, el talento y la grandiosidad con la que nuestro Alcalde
Perpetuo manejaba los números con el fin de llevar a sus administrados a
alcanzar las mayores cotas de pobreza de nuestra ciudad.
En esta ocasión no ha sido posible aprobar la propuesta
para el año 2016, no porque sea la Sra. Román quien haya sido la encargada de
presentarla ante sus compañeros y, haciendo honor a las características que le
atribuyen, haya destrozado las cuentas municipales al no conseguir cuadrarlas,
pues esta cuestión es tan sencilla como inventar tantos ingresos como gastos se
quieran imaginar; después nadie controla el cumplimiento del presupuesto y si
nos equivocamos olvidando incluir un “mantenimiento de alumbrado público” por
aquí o “un contrato de monitores de piscina” por allá, ya lo mantendremos
ocultos en los cajones y si aprietan los proveedores ya está el magnífico recurso
al “Expediente de Modificación de Crédito” y todo arreglado. Que como diría el
Sr. Carreira “el presupuesto es eso: un pre supuesto, por lo que no puede
acertarse en su totalidad”.
No, no podemos achacar a la concejala del ramo el
rechazo a su proyecto, ni a ella, ni a su mala fama de yegua de Atila, pues según
el vocero de turno la causa se debe a que ”hay un 10% que hay que detallar o
matizar” y este fin de semana nuestros próceres se dedicarán en cuerpo y alma a
realizar esa precisión que al parecer se centrará “en inversiones y obras” ya
que el “Presupuesto consolidado de la ciudad alcanzaría los 250 millones de
euros y está perfilado en un 90%”.
Así se expresaba el nuevo militante del Partido Popular
(¡Ay! ¿quién le ha visto y quién le ve, Sr. Hachuel), quien ante la duda de un
periodista sobre la cantidad y el concepto sentenciaba que eran consolidados y
sentando cátedra añadía que “los presupuestos ya no se hacen de una forma que
no sean consolidados”. Otro que ha debido ir a las mismas clases de economía
que el Sr. Vivas. No entiendo cómo los políticos prefieren hundirse en el barro
antes que decir un simple “no lo sé” o un “espere, que me informo”. Es que ni
siquiera debe saber a qué reuniones asiste, normal en este individuo que ni había
tomado posesión de su cargo de presidente de la empresa en cuyo consejo de
administración se pretendía aprobar el presupuesto de esa sociedad.
Si hacemos caso a las declaraciones del supuesto
portavoz del ejecutivo municipal el presupuesto de nuestro Ayuntamiento, organismos
y sociedades se reduce un 8,5%, pues el publicado el 31 de diciembre de 2014
para este ejercicio de 2015 asciende a 273.122.403,21 euros.
¿Dónde aplicará las tijeras el Sr. Vivas? ¿En qué
servicios se reducirán drásticamente los más de 23 millones de euros en que
disminuye su presupuesto? Estos deben ser los presupuestos tan realistas que
nos vendía el Sr. Vivas hace unos días, en los que nos aleccionaba sobre las bondades del proyecto: la reducción de
deuda, el “protagonismo” de los servicios básicos y garantizar el plan de
barriadas y no digamos el pago de los salarios. Pues decía nuestro ínclito
Alcalde que eran unos presupuestos “rigurosos en el gasto y los ingresos y seguiremos
con el criterio conservador de caja para
los ingresos”. Es decir que si tenían todas las características con que
son definidos por nuestro Alcalde Perpetuo, con una sola cifra el vocero se ha cargado toda la política de
vendedor de humo del Sr. Vivas.
No se puede dejar a impresentables indocumentados cuestiones
tan importantes como el principal documento de acción de un gobierno, para que
por su desconocimiento de la realidad, su falta de compromiso político y sobre
todo su incapacidad para prepararse los asuntos, como si su fácil verbo fuera
la solución de todo, hunda todo el trabajo comercial de la estructura
publicitaria que nuestro Alcalde tiene a su servicio, mantenida con el
presupuesto de todos los ceutíes, pero a
su servicio.
Además asegurar que está cerrado el presupuesto en un
90% es una perogrullada que cualquier miembro del supuesto ejecutivo municipal
debería saber y que no significa que quede sólo un mínimo del 10% por
“detallar” como dice este ignaro portavoz. Si se conocen un poco las cuentas de
nuestro ayuntamiento, sabemos que casi el 90% del presupuesto ya está comprometido
(los gastos de personal ascienden a un 43%; el pago de las deudas a un 15%; los
servicios ya contratados sobre un 25%; y las inversiones plurianuales implican
un 5%) por lo que sólo podrían cambiar un 10% del total de las cuentas de un
año para otro. Es decir que es la totalidad del presupuesto que pueden decidir lo
que tienen que “detallar” en este fin de semana nuestros concejales.
Durante quince años no ha existido ningún problema para
aprobar el proyecto de presupuesto que llevara el concejal de Hacienda a la
reunión del ejecutivo, pero esta vez no existe acuerdo en cómo se van a
repartir los 28 millones que quedarán libres de un presupuesto consolidado de
unos 278 millones de euros (no se crean uds. las mentiras del portavoz). Las
tensiones que existen entre los distintos sectores del partido popular hacen
que no se lleguen a acuerdos en los que poder cuadrar las cuentas.
No crean que lo que mueve a nuestros esforzados ediles
es lo que ellos llaman el “interés general”, lo único que hace que saquen las
“navajas” en el consejo de gobierno para defender “su” presupuesto es el poder
distribuir entre sus amistades una mayor cantidad del mismo, así de este modo
poder contentarlos y que sepan quién es el responsable de que ellos sigan
recibiendo sus buenos beneficios.
Pues como comprenderán no es lo mismo una obra de
nuevas canalizaciones de Medio Ambiente a través de Acemsa, que una
externalización de ayudas sociales de la Concejalía de Asuntos Sociales a
través de una Organización No Gubernamental (nombre que nunca he entendido, ya
que no hay nada más dependiente del presupuesto del gobierno que este tipo de
organizaciones); en un caso serán agraciadas unas empresas y en otro, otras muy
distintas; pero siempre habrá un
beneficio, no lo duden, que intentarán que escape al control de la
sociedad.
El error cometido por el vocero del Sr. Vivas es
tremendo, ha dejado entrever la desunión, el malestar y las peleas que existen
ya dentro de este desgobierno entre los distintos sectores del Partido Popular,
donde cada uno ya sólo va a intentar premiar a los suyos con el deseo de que se
lo tengan en cuenta más pronto que tarde, como me decía un conocido editor “van
a saco”. ¡Qué malo es ser trece!
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