Para permitir cumplir con los servicios que tiene
encomendados cualquier administración es imprescindible disponer de una
hacienda pública sostenible, sobre todo en el largo plazo. Si se desea mantener
la limpieza viaria, la seguridad en nuestras calles, el alumbrado público y
realizar las inversiones en viviendas, guarderías, infraestructuras sociales,
deportivas, y en nuestras barriadas es necesario que la Hacienda Local tenga un equilibrio entre los gastos y los ingresos.
Además un sistema tributario
debe ser justo, en el que cada ciudadano contribuya en función de sus ingresos
y teniendo en cuenta el número de personas que forman cada familia, renta y
habitantes serán las dos características en las que se base la Hacienda del
Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC) si obtenemos la confianza de
los ceutíes el próximo 26 de mayo.
Y otra de las
características de la hacienda local es que debe ser eficiente y eficaz. El
Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) del Consejo General de
Economistas en su estudio sobre el Panorama de la Fiscalidad Local 2018,
destapaba las vergüenzas de la pésima gestión de nuestro inepto Alcalde, en
este caso de nuestros impuestos. Según el REAF en relación a la eficacia
impositiva, que el estudio mide como la relación entre la recaudación y los
derechos liquidados, Ceuta en los impuestos directos se sitúa en penúltima
posición con un 77,30% de recaudación sobre los derechos liquidados, superada
por Melilla y delante de Andalucía. En los impuestos indirectos, Ceuta ocupa la
última posición, con un 69,60% de eficacia, frente a Melilla que está en
primera posición con un 99,80% de cobro de los derechos liquidados, casi la
perfección.
Según este estudio, en los impuestos directos Ceuta se
coloca en los tramos de cabeza en todos ellos en cuanto a presión fiscal,
llamando la atención el de vehículos donde se ocupa el primer lugar, con una
cuota para un turismo entre 12 y 16 caballos de 143,9€ mientras que en Melilla,
el mismo vehículo abona 71,9€, la mitad. Lo que analiza el REAF son las cuotas,
no las bonificaciones, y según ese estudio, la cuota es el doble en Ceuta que
en Melilla.
Otro de los graves problemas
que tiene la Hacienda local es su desmedida dependencia de los ingresos del
Estado, así si en 2003 el 60% de los ingresos procedían de la recaudación de los
impuestos locales, para este año ese porcentaje se ha reducido al 33%, del
resto solo la compensación por IPSI está asegurada por una ley, los demás están
supeditados al capricho del Ministro de
turno. Tras casi dos décadas padeciendo el Desgobierno del Sr. Vivas, nada se
ha avanzado en asegurar las trasferencias del Estado, con gobierno de su partido
o del PSOE, los intereses de Ceuta se han subordinad a los intereses de estos
dos partidos nacionales, que nada han hecho por defendernos.
Para el MDyC es necesario el
acuerdo con el Gobierno de España para que se garantice por ley la financiación
de unos servicios a la gente de Ceuta iguales que el resto de los españoles,
por lo que el principal objetivo será la inclusión de las transferencias del
Estado en una ley que impida el capricho del gobierno de turno y solo en una
candidatura como la del MDyC, que no está supeditada a los intereses de un
partido nacional, puede conseguirse que los derechos de los ceutíes sean
tenidos en cuenta, como se ha logrado la subida del 75% en la subvención del
billete de barco, gracias a Coalición Canaria, no a ninguno de estos dos
partidos nacionales que una vez obtenido nuestro voto se olvidan de nuestros
intereses.
Desde el MDyC construiremos una Hacienda Local sostenible,
justa, eficiente y eficaz, exigiendo, porque nuestra independencia nos permite
hacerlo, una financiación asegurada por una ley que garantice los recursos necesarios
para llevar a cabo nuestro programa, un programa cuyo principal objetivo es
desarrollar un modelo económico que genere empleo, que nos permita generar los
suficientes medios para solucionar los graves problemas que tiene nuestra
ciudad. Un programa que solo pretende crear un modelo de ciudad en el que todos
podamos desarrollar nuestro proyecto de vida, especialmente nuestros jóvenes.
Sabemos que es difícil, pero desde el MDyC vamos a poner toda la ilusión y
esfuerzo para conseguirlo, porque sabemos que es posible. Esperamos su
confianza para ponernos en marcha.
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