Parece un hecho consumado que el grupo mayoritario de la oposición pase a engrosar las filas del gobierno municipal de nuestro Alcalde Perpetuo, D. Juan Vivas. Las negociaciones para que la Unión Demócrata Ceutí e Izquierda Unida apoyaran los presupuestos del Partido Popular no se han ceñido, única y exclusivamente, a los fríos números de las cuentas, también se ha acordado la gestión del dinero, que siempre es lo realmente importante, es decir quién es el que al final decide dónde va el dinero de todos los ceutíes (y de todos los españoles y europeos que contribuyen con sus impuestos a mantener este presupuesto municipal cada vez más dependiente de los impuestos de los demás).
A primeros de diciembre, el vicealcalde D. Pedro, pactaba con el líder de la oposición, D. Mohamed, la cesión de la concejalía de Bienestar Social al Grupo UDCE-IU, cesión que lleva incorporada la gestión del presupuesto de la concejalía y el nombramiento de dos altos cargos, uno que administraría el mal llamado “salario social” y demás subvenciones y canonjías adscritas al departamento; y otro que se encargaría de la denominada “Oficina del Príncipe”. Así el Sr. Mohamed Alí será el nuevo concejal de Bienestar Social y el Sr. Mohamed Haddu será el responsable de la distribución del salario social y queda pendiente de la decisión de la Ejecutiva de la UDCE la persona que ocupará la tercera silla.
Pero no crean que ha salido de la mente del Sr. Gordillo esta idea, sería pedir demasiado. La integración de la oposición en el Gobierno municipal es una idea de nuestro Alcalde Perpetuo, D. Juan Vivas, a quien no le gusta la oposición, por muy demócrata que se sienta, eso de las críticas lo lleva muy mal. Así mata dos pájaros de un tiro, se quita de en medio al mayor grupo de la oposición, de esta forma ya no tendrá que pelearse con ellos en los Plenos; y deja solos a los “insolidarios” socialistas, que no son capaces de apoyar unos grandiosos “planes” de integración social pensados por su infalible persona para mayor gloria suya y que serán gestionados por el partido de concejales musulmanes (es el único partido que sólo tiene concejales musulmanes, no se me altere Sr. Mohamed Alí), a pesar de que esos excelsos “planes” no tengan ningún programa desarrollado y pueda suponer un reparto de prebendas entre las amistades cercanas a un partido, mas que a las personas realmente necesitadas de ese denominado “salario social”.
Con este golpe de efecto, nuestro Primer Edil cree que podrá descansar tranquilamente, sabiendo que sus concejales pueden seguir asistiendo a los Plenos sin realizar sus deberes; piensa que ya no habrá oposición que les lea la cartilla; y si lo hace, ya estará él para saltar directamente sobre la yugular, tal como ha acordado, de la portavoz socialista y si él falla, ya estará la agradecida prensa del movimiento para decir lo inútil que es, (la oposición, no se confundan) y aquello de que cualquier tiempo pasado fue mejor. Ese es el problema de nuestro Alcalde Perpetuo, no le gusta la oposición, pues ésta insiste en sacar sus defectos, sus problemas, su falta de soluciones, su continuidad de los proyectos del GIL, y claro eso no puede ser en el mundo de ¡Viva Vivas! que habitamos, pues aquí todo es perfecto. Tan perfecto que hasta no existe oposición.
Y no se preocupen por la forma de gobernar. No es la primera vez que el Sr. Vivas comparte gobierno, ya lo hizo con los miembros del Grupo Independiente Liberal (GIL) que apoyaron la moción de censura al Sr. Sampietro, y con el Partido Democrático y Social de Ceuta del Sr. Mizziam. Y es más o menos lo mismo, uno es musulmán como el Sr. Mizziam y otro ya ostentó un cargo oficial con el GIL; así que debe ser de los buenos y honrados “gilistas” que tanto pululan por el Gobierno del Sr. Vivas, que más da incluir uno más. Y todo consiste en no meter la nariz en el presupuesto del otro, haga lo que haga. Pero en este juego de reparto del pastel municipal, hay quien gana y quien pierde.
¿Qué gana la UDCE entrando en el Gobierno municipal? Sobre todo calmar a su ejecutiva, que ante la rotunda negativa de los socialistas a las exigencias de su líder de entrar en la Delegación del Gobierno como Jefe de Gabinete y en el reparto de los puestos del Plan de Empleo, se estaban poniendo demasiado nerviosos y necesitaban poder repartir un presupuesto entre sus votantes para confirmarles que ellos también son capaces de dar prebendas; tal como hacía, no ha mucho tiempo, otro partido entre los suyos y no perder ese trozo del pastel que han conseguido y permitirles soñar con ese futuro demográfico, con que sueñan los perdedores. Y sobre todo arrebatar al Sr. Mizziam la oficina del Príncipe, cargo que le prometieron los dirigentes del Partido Popular si se presentaba a las elecciones municipales con la finalidad de dividir los votos de cierto colectivo.
¿Qué gana Izquierda Unida uniéndose a un Gobierno del Partido Popular? Pues absolutamente nada, pero el Sr. Mohamed Haddu verá colmadas su ansias de poder y deseos de protagonismo. Vuelve a tener un cargo oficial. IU, pierde, pero qué le importa a él lo que le pase a esa jaula de grillos.
Y para el Partido Popular, ¿cuál es el beneficio obtenido? Quien más gana es nuestro Alcalde Perpetuo, el Sr. Vivas: se queda sin oposición y vende la imagen de un Alcalde de todos los ceutíes, negociador e integrador, el único capaz de hacer frente a la marcha de la tortuga. Pero quien más pierde es el PP ante su electorado, pues no comprenderá cómo es posible ceder cuotas de poder, cuando se le ha otorgado una mayoría tan amplia para implementar su proyecto. Y sobre todo su presidente regional, quien será considerado culpable de alta traición al conceder a los concejales de UDCE-IU (¡musulmanes y comunistas!) el control de una parte importante del presupuesto municipal; quienes vendieron que la integración en las listas sería la solución para impedir el acceso de esos partidos coaligados con el PSOE al sillón consistorial, ahora se dedican a repartir los cargos municipales con ellos. ¿Lo entenderán los votantes del PP, Sr. Gordillo? Un avezado lector de El Príncipe quien desarrolló el plan de integración de la oposición en el gobierno del Sr. Vivas.
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